1978. Londres.
“El sexo es sólo una parte de la dependencia sexual. El placer se convierte en la motivación, pero la satisfacción real es romántica. La cama se convierte, en un foso donde las luchas y tensiones de una relación se intensifican o suavizan. El sexo no trata sobre la actuación (el hecho físico), trata sobre una cierta manera de comunicación basada en la confianza, en la exposición y vulnerabilidad que no pueden ser expresadas de otra manera. El sexo se convierte en un microcosmos de la relación, el campo de batalla, un exorcismo".
“El sexo es sólo una parte de la dependencia sexual. El placer se convierte en la motivación, pero la satisfacción real es romántica. La cama se convierte, en un foso donde las luchas y tensiones de una relación se intensifican o suavizan. El sexo no trata sobre la actuación (el hecho físico), trata sobre una cierta manera de comunicación basada en la confianza, en la exposición y vulnerabilidad que no pueden ser expresadas de otra manera. El sexo se convierte en un microcosmos de la relación, el campo de batalla, un exorcismo".
(Extraido de: La balada de la dependencia sexual)
Nan Goldin, fotógrafa.